La memoria fotográfica ¿de qué se trata?
La memoria fotográfica es la capacidad para recordar durante más tiempo ciertas escenas; la memoria eidética es la habilidad atribuida a algunos niños (en adultos es muy poco común o inexistente) para recordar imágenes con un nivel de detalle muy alto. Por otra parte, la hipermnesia es un grado superlativo de memoria en el que se muestra una retención de imágenes con un detalle máximo.
Esta capacidad no es hereditaria y si no se entrena ni se cultiva, la habilidad acaba desapareciendo. Hasta hoy día, no existen estudios que aclaren si la memoria fotográfica puede ser entrenada o ser aprendida. Los mecanismos subyacentes a la memoria fotográfica y cómo poder desarrollarla son un misterio.
La visión y la memoria son capacidades muy relacionadas entre ellas. Está comprobado que las personas con ésta habilidad mueven sus ojos lateralmente (como si estuvieran escaneando una imagen) cuando intentan recordar una escena con precisión. Pero también modelan la imagen y recortan algunos detalles. Esto se debe a que cuando se intenta fotografiar mentalmente una imagen, se interpreta a través de unos condicionamientos y unas experiencias previas que se han experimentado de los elementos que aparecen en la fotografía.
Las palabras contrarrestan esta habilidad, ya que entre el 2%
y el 10% de los niños que tienen memoria eidética, les desaparece al crecer.
Cuando los niños llegan a los 6 años y desarrollan otras capacidades como el
habla, pierden esta memoria.
Aun así, la memoria fotográfica es muy interesante para investigar y también para intentar desarrollarla.
Editado por última vez: 28/04/2019, 18:55.